El ordenamiento territorial de los pueblos indígenas sigue siendo un tema no resuelto en su real dimensión, pese a ser una base fundamental para garantizar el desarrollo y continuidad cultural de los pueblos indígenas. El derecho al territorio es crucial para la vida y por ello, es constante su exigencia y sigue en la agenda de las reivindicaciones y derechos colectivos y desarrollo de las comunidades nativas. El ordenamiento comunal se da bajo la imposición del modelo organizacional para los pueblos indígenas en las denominadas “comunidades nativas”, creemos que en el transcurso del proceso de reflexión política e incluso de la autodeterminación de los pueblos indígenas se tiene que dar otras formas de organización colectiva más genuinas o cercana a la realidad de los pueblos indígenas. Es decir, el modelo actual requiere ser fortalecido tanto a nivel interno como para las relaciones o negociaciones con el entorno externo.
La gobernanza comunal se refiere a la forma en la que la comunidad indígena es administrada y en que se reconcilian las prioridades e intereses contrapuestos de sus miembros. Se ocupa de los procesos mediante los cuales los comuneros participan en la toma de decisiones, los órganos de gobierno rinden cuentas y la comunidad obliga a sus miembros a cumplir sus normas, costumbres y formas de lograr justicia.
Por consiguiente, el primer espacio que requiere atención es recuperar la autoridad de la asamblea comunal, como la máxima instancia de decisión y resolución de la agenda de desarrollo y proyecciones para el bienestar de las comunidades indígenas. Las autoridades comunales asumen la responsabilidad de dirigir la gestión política y administrativa de la comunidad. Igualmente, los acuerdos consignados o formalizados en el estatuto de la comunidad, así como en su respectivo reglamento interno cobra importancia y tienen que estar enmarcados dentro del respeto de la decisión de la mayoría y la democracia participativa, las cuales necesitan ser consolidadas, como el embrión del poder o empoderamiento de las comunidades nativas a nivel interno como para el nivel externo.
En ese sentido, es necesario fortalecer la gobernanza comunal, como proceso fundamental para mejorar la administración comunal, control del acceso y uso de los recursos naturales de la comunidad, equilibrar las relaciones de poder comunitaria, establecer la distribución equitativa y transparente de los beneficios, entre otros aspectos de la realidad cotidiana de las comunidades nativas, siendo todo ello muy importante para garantizar una vida plena, justa, sostenible y solidaria.
(*) Artículo publicado en la Agenda Amazonía 2022. Mes de abril.